A las once y quince minutos de la noche, un sismo de 6,4 grados en la escala de Ritcher, “levanto” de la cama a miles de amazonenses que salieron raudamente a las calles. El siniestro que con el paso de las horas se confirmó su epicentro en la zona este de Utcubamba, si bien es cierto no causó daños personales, pero sí dejó daños materiales.
En el caso de Chachapoyas de acuerdo a los reportes de Defensa Civil dos viviendas ubicadas en los asentamientos humanos fueron destruídas y cientos de casas ubicadas en la zona histórica han sufrido daños en sus techos y paredes.
De acuerdo a las informaciones que llegan al centro de emergencia de Defensa Civil, muchas familias han perdido aparatos electrodomésticos, básicamente como televisores que cayeron al suelo como consecuencia del fuerte movimiento.
Hasta las primeras horas de la madrugada muchas familias optaron por pernoctar en las calles a fin de preservar sus vidas en caso de una réplica, la misma que felizmente no sucedió; sin embargo especialistas en la materia indican que sismos de mayor dureza y consecuencias inimaginables podrían suceder en cualquier momento por lo que tenemos que seguir preparados.
Datos complementarios indican que en la zona de Bagua la plataforma de la carretera que une Chachapoyas con Chiclayo colapso por lo que el transporte de carga y pasajeros se ha visto interrumpida.
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